Rusia cuenta con suficientes reservas para sobrevivir en condiciones de precios extremadamente bajos del petróleo, pero no puede dejarse llevar por los llamados populistas de gastar sus fondos, declaró hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
«Sí, Rusia podrá, tenemos una gran reserva de fortaleza, el llamado colchón de seguridad, pero hay que ser muy cuidadosos a la hora de usar esas reservas», afirmó en una entrevista al canal de televisión Rossiya 1, en referencia al Fondo de Bienestar Nacional (FBN).
«No podemos ceder ante algunas declaraciones populistas del tipo, repartamos todo a todos, inundemos la economía de dinero, y otras semejantes», ha dicho el portavoz del presidente ruso.
La víspera, el director del Tribunal de Cuentas de Rusia, Alexéi Kudrin declaró al mismo medio que el Gobierno ruso no debía limitarse a la hora de tomar recursos del FBN, «hucha» creada con los ingresos por las exportaciones de petróleo cuando su precio era elevado.
Según el funcionario, el FBN podría aportar a la solución de la crisis incluso más de la mitad de sus fondos, algo en lo que no concuerda con el Gobierno, que prefiere un gasto más cauteloso de esos recursos.
A principios de abril este fondo acumulaba 12,85 billones de rublos (unos 165.384 millones de dólares), equivalentes al 11,3 % del producto interior bruto (PIB) del país.
Por su parte, el ministro de Finanzas de Rusia, Antón Siluánov, explicó este sábado al mismo medio que el Gobierno se limitará a cubrir el déficit presupuestario ocasionado por el mayor derrumbe de los precios del crudo de la historia con solo 2 billones de rublos (26.600 millones de dólares) del FBN.
EFE