La Eurocámara aprobó el 7 de febrero las nuevas normas que obligarán a bancos y proveedores de pago en la Unión Europea (
UE) a ejecutar transferencias en euros en menos de diez segundos y a ofrecer estos pagos instantáneos al mismo precio que el resto.
El pleno del Parlamento Europeo dio luz verde con 599 votos a favor, 7 en contra y 35 abstenciones al acuerdo político al que había llegado con los Estados miembros el pasado noviembre, con lo que podrá entrar en vigor una vez que el Consejo de la UE (los países) también lo ratifique.
«Los consumidores pueden decir adiós al inconveniente de tener que esperar dos o tres días laborables para acceder a su dinero. Estamos proporcionando algo que realmente interesa a ciudadanos y empresas: transferir dinero en menos de diez segundos en cualquier momento del día», celebró en un comunicado el eurodiputado holandés Michiel Hoogeveen, responsable del dosier.
El nuevo reglamento prevé que estas transferencias instantáneas tengan que ser procesadas de manera inmediata independientemente del día o la hora a la que se reciben de modo que el dinero llegue a la cuenta del beneficiario en menos de diez segundos.
El pagador también tendrá que ser informado dentro de este plazo de que la transferencia se ha llevado a cabo.
Pagos por transferencia inmediata
Además, el precio que los proveedores de pago cobran tanto a quien efectúa la transferencia inmediata como a quien la recibe no puede ser mayor que el que cobran por una transferencia normal en euros.
Por otro lado, las nuevas normas incluyen medidas para mejorar la detección y la prevención de los fraudes de modo que los fondos no lleguen al receptor incorrecto por fraude o error, para lo que exigirá a los proveedores de pago que proporcionen gratis un servicio para verificar la identidad del cliente a quien se quiere enviar dinero.
Cuando se detecte que el nombre que proporciona quien hace la transferencia no coincide con el titular de la cuenta beneficiara, el proveedor tendrá que informarle o, de lo contrario, pagarle una compensación si ha sufrido algún perjuicio financiero. Además, deberán permitir a los clientes fijar un montante máximo para las transferencias instantáneas.
Bancos y proveedores de pago estarán asimismo obligados a comprobar si sus clientes están sancionados o sujetos a medidas para la prevención del blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
Una vez entren en vigor, los Gobiernos nacionales tendrán un año para empezar a aplicar las nuevas reglas.
EFE.