El Gobierno chino realizó algunos ajustes para solucionar este problema, pero según la Asociación China de Reciclaje de Recursos fueron insuficientes para satisfacer la rápida demanda cambiante del mercado.
El mecanismo de reciclaje de electrodomésticos en China, introducido en 2009, acumula una deuda de casi 20.000 millones de yuanes (2.800 millones de dólares, 2.550 millones de euros), según una encuesta de la Asociación China de Reciclaje de Recursos.
El desequilibrio financiero se debe a una serie de factores, entre los que destacan los pagos insuficientes de las empresas fabricantes de electrodomésticos, el desfase temporal entre la introducción de la regulación y la emisión de subsidios, y los desajustes en los pagos a los fondos y a los recicladores, informó hoy el portal de noticias económicas Yicai.
En 2022, el mecanismo financió el reciclaje de 90 millones de unidades de electrodomésticos, un aumento significativo respecto a los 12 millones de unidades de 2012.
Sin embargo, el crecimiento del reciclaje conllevó a un aumento de la deuda, ya que los ingresos de los fondos no han sido suficientes para cubrir los gastos.
La encuesta del organismo de reciclaje resolvió que las empresas fabricantes de electrodomésticos deberían haber pagado 19.800 millones de yuanes (2.750 millones de dólares, 2.524 millones de euros) por los residuos vendidos entre 2016 y 2019.
No obstante, solo pagaron 10.300 millones de yuanes (1.432 millones de dólares, 1.313 millones de euros), un ratio del 52%.
Este déficit se debe a una serie de factores, entre ellos, la falta de transparencia en los volúmenes de ventas de las empresas fabricantes, y la complejidad del sistema de pago.
Además, el mecanismo de reciclaje se enfrentó a un desfase temporal entre la introducción de la regulación en 2009 y la emisión de subsidios en 2012.
Sin recibir subsidios
Durante este periodo, las empresas de desmantelamiento acumularon electrodomésticos sin recibir subsidios, lo que afectó a su desempeño.
La encuesta también encontró que las empresas fabricantes pagan menos a los fondos de reciclaje de lo que estos asignan a los recicladores.
Por ejemplo, las empresas pagan 7 yuanes (0,97 dólares, 0,89 euros) por un aire acondicionado, mientras que el fondo asigna 130 yuanes (18,07 dólares, 16,57 euros) a los recicladores.
El Gobierno chino realizó algunos ajustes para solucionar este problema, pero según la Asociación China de Reciclaje de Recursos fueron insuficientes para satisfacer la rápida demanda cambiante del mercado, lo que también se convirtió en una de las razones importantes para el déficit de fondos destinados a desechar electrodomésticos.
Desde el año 2021, el Gobierno del país asiático tomó la decisión de reciclar solamente su propia basura en su afán de implementar una «economía circular».
China afirma que invirtió en la creación de 159.000 puntos de reciclaje, más de 24.000 vertederos y 1.837 centros de clasificación de desechos, a pesar de que la mitad de las ciudades del país aún no dispongan de plantas de incineración.
EFE.