El Banco Popular de China (BPC, central) mostró este viernes su confianza en "mantener la inercia positiva del desarrollo económico estable y a largo plazo" pese a la actual crisis del COVID-19, que todavía no ha permitido al país retomar su actividad económica habitual con normalidad.
En una entrevista con el diario económico Yicai, el vicegobernador del BPC, Chen Yulu, quiso garantizar su "confianza total" en las tareas de control del brote, que ya ha dejado más de 63.500 casos y casi 1.400 muertes en China.
En su opinión, la principal tarea es "aumentar el apoyo financiero a Hubei (la provincia donde surgió el brote) y a otras áreas fuertemente afectadas".
Desde que comenzó el brote, el pasado mes de diciembre, el BPC "ha protegido completamente las necesidades de servicios financieros básicos en las áreas afectadas", afirmó su vicegobernador.
Chen destacó, entre las medidas tomadas por el banco central junto a diversos ministerios y agencias estas semanas, las orientadas a facilitar el crédito a las empresas productoras de material médico necesario para la prevención de los contagios y para el tratamiento de los infectados.
La escasez de suministros, especialmente en Hubei, es uno de los principales problemas a los que se enfrentan las autoridades al intentar tratar de contener la expansión del coronavirus y también implica que muchos médicos están trabajando sin la protección necesaria.
Según datos hechos públicos hoy por la Comisión Nacional de Salud, el 3,8 % de los casos confirmados a nivel nacional, es decir, 1.716 personas, son trabajadores sanitarios.
A pesar de que las prolongadas vacaciones del Año Nuevo lunar terminaron oficialmente este pasado lunes, muchas empresas todavía apuestan por el teletrabajo y, entre las que no pueden optar por esa solución, el retraso de la fecha de la vuelta al trabajo parece ser la salida más generalizada.
Sobre esta situación, Chen prometió que el BPC "apoyará totalmente la reanudación del trabajo y de la producción lo antes posible", aunque no ofreció detalles al respecto de qué medidas tomará la institución que representa.
Preguntado acerca de si el brote del COVID-19 -nombre oficial de la enfermedad causada por el coronavirus de Wuhan- afectará a las políticas aperturistas promovidas por Pekín, Chen rechazó la teoría y aseveró que "la epidemia no ha afectado a la velocidad de implementación de las medidas establecidas para la apertura financiera".
EFE