Es muy habitual confundir los usos para los que están indicados los protectores gástricos con los usos de los fármacos antiácidos. Seguramente, alguna vez te hayas tomado un protector gástrico para tratar la acidez ocasional o para prevenirla antes de una comida copiosa.
Sin embargo este no es el uso adecuado de este tipo de fármacos, ya que los protectores gástricos no deben utilizarse para tratar la acidez o el ardor de estómago.
Como esta confusión suele ser muy habitual queremos explicar a lo largo del artículo qué son y para que se utilizan los protectores gástricos, así como los usos correctos de los antiácidos.
¿Qué es un protector gástrico?
Los protectores gástricos son los fármacos conocidos como antiulcerosos. Se utilizan para el tratamiento de las úlceras gástricas. Los primeros fármacos eficaces para este fin fueron los antihistamínicos que actúan selectivamente en el estómago inhibiendo la estimulación de la síntesis del ácido clorhídrico que se segrega durante la digestión.
No obstante, cada vez son menos utilizados para el tratamiento de la úlcera péptica porque en los años ´90 se introdujeron en el mercado los inhibidores de la bomba de protones. Estos medicamento son, según los estudios, el segundo grupo de fármacos más consumido en España.
Estos protectores gástricos bloquean el sistema por el cual se secretan unas moléculas llamadas hidrogeniones. Como consecuencia la mucosa del estómago no puede sintetizar ácido clorhídrico.
Además del tratamiento de las úlceras gástricas y duodenales, los protectores gástricos se emplean en el tratamiento y profilaxis de otras patologías que cursan con hipersecreción gástrica como:
Algunos de los medicamentos que pertenecen a esta familia son el omeprazol, esomeprazol y lansoprazol. Los médicos decidirán cuál recetar en cada caso en función de la duración del tratamiento o la intensidad de los síntomas, entre otros criterios.
¿Cuándo debemos tomar un protector gástrico?
Como hemos comentado estos medicamentos están sujetos a prescripción médica y están indicados para el tratamiento de algún tipo de enfermedad o trastorno que afecte a la mucosa gástrica. No son fármacos para el tratamiento de la acidez estomacal.
¿Y los antiácidos?
Por otra parte, los antiácidos son los medicamentos que neutralizan el exceso de ácido en el estómago, volviendo esta sustancia menos agresiva para las paredes del órgano. Al contrario que los protectores gástricos, los antiácidos no inhiben o bloquean la secreción del ácido del estómago, sino que solamente contrarrestan sus efectos.
¿Cuándo debemos tomar un antiácido?
Podemos decir, entonces, que los antiácidos se deben tomar cuando, después de alguna comida, sentimos algún síntoma de acidez en el estómago o ardor en la boca del mismo. Los alimentos que contienen mucha grasa o los alimentos picantes favorecen la aparición de acidez en el estómago. Por eso están indicados para aliviar las indigestiones, ya que actúan de forma directa y en un corto periodo de tiempo.
Entre los antiácidos que podemos encontrar en el mercado hoy en día se encuentra el famoso bicarbonato o las sales de magnesio, entre otros muchos. A diferencia de los anteriores, los antiácidos no necesitan receta médica.
Los síntomas y las causas de las úlceras gástricas
Las úlceras gástricas son unas lesiones que se desarrollan en la pared interna del estómago. El síntomas más frecuente es el dolor. Este dolor se debe al ardor que produce el ácido gástrico en la mucosa estomacal.
El ácido estomacal hace que empeore el dolor, al igual que lo hace el hecho de tener el estómago vacío. Junto al dolor las úlceras gástricas también pueden producir:
Por otra parte, en cuanto a las causas desencadenantes, las más frecuentes son las infecciones producidas por la bacteria Helicobacter pylori y el uso prolongado de fármacos antiinflamatorios no esteroides como la aspirina.
Conclusión
Los protectores gástricos o medicamentos antiulcerosos se utilizan para tratar diferentes afecciones que se producen en el estómago y que requieren que se bloquee la producción de ácido en el mismo. En el otro extremo los antiácidos son sustancias que neutralizan el ácido estomacal, no inhiben su secreción. Por lo tanto, estos últimos son lo que se deben utilizar para el tratamiento de la acidez.
Consulta con tu médico o farmacéutico qué remedio es el ideal para ti y nunca te automediques, ya que podrías estar tomando el fármaco equivocado para tu situación.
Agencias