Se descubrió que un curso de reducción del estrés basado en la atención plena (Mbsr, por sus siglas en inglés) beneficia a los pacientes con dolor crónico y depresión, lo que conduce a una mejora significativa en las percepciones de los participantes sobre el dolor, el estado de ánimo y la capacidad funcional, según un estudio publicado en el Journal of the American Osteopathic Association.
La mayoría de los encuestados del estudio (89%) informó que el programa les ayudó a encontrar formas de afrontar mejor su dolor, mientras que el 11% permaneció neutral.
El dolor crónico es una afección médica común y grave que afecta a aproximadamente 100 millones de personas en los Estados Unidos, lo que se correlaciona con costos anuales de aproximadamente $ 635 mil millones.
El estudio a pequeña escala se llevó a cabo en una población semirrural de Oregón, donde los problemas de asequibilidad, adicción y acceso a la atención son comunes. Los participantes recibieron instrucción intensiva en meditación de atención plena y hatha yoga consciente durante un período de ocho semanas.
"Mucha gente ha perdido la esperanza porque, en la mayoría de los casos, el dolor crónico nunca se resolverá por completo", dice Cynthia Marske, médico osteópata y directora de educación médica de posgrado en las Clínicas de Salud Comunitaria de Benton y el condado de Linn. "Sin embargo, el yoga y la meditación conscientes pueden ayudar a mejorar la estructura y función del cuerpo, lo que apoya el proceso de curación".
La curación y la sanación son inherentemente diferentes, explica.
"Curar significa eliminar enfermedades, mientras que sanar se refiere a volverse más completo", dice. "Con el dolor crónico, la curación implica aprender a vivir con un nivel de dolor que sea manejable. Por eso, el yoga y la meditación pueden ser muy beneficiosos".
El estudio encontró que la meditación consciente y el yoga condujeron a mejoras significativas en las percepciones de los pacientes sobre el dolor, la depresión y la discapacidad. Después del curso, las puntuaciones del cuestionario de salud del paciente (PHQ-9), una medida estándar de la depresión, se redujeron 3,7 puntos en una escala de 27 puntos. Según Marske, algunos pacientes experimentan una caída similar por el uso de un antidepresivo.
"El dolor crónico a menudo va de la mano con la depresión", señala Marske. "La meditación y el yoga basados en la atención plena pueden ayudar a restaurar la salud física y mental del paciente y pueden ser efectivos solos o en combinación con otros tratamientos como la terapia y la medicación".
Los participantes del estudio recibieron instrucción en Mbsr, un programa educativo sistemático basado en capacitar a las personas para que tengan una conciencia de sí mismas en el momento presente y de una manera libre de prejuicios. Los hallazgos refuerzan otra evidencia de que Mbsr puede ser un tratamiento complementario útil para el dolor crónico mientras mejora la depresión percibida.
"La conclusión es que los pacientes están buscando nuevas formas de hacer frente al dolor crónico y existen tratamientos no farmacéuticos eficaces", dice Marske. "Nuestros hallazgos muestran que la meditación y el yoga pueden ser una opción viable para las personas que buscan alivio del dolor crónico".
EFE