La República Bolivariana de Venezuela lamenta y rechaza las desacertadas declaraciones realizadas el día de hoy por la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, durante la 46° sesión ordinaria del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Su desbalanceado reporte es emitido por mandato de una politizada resolución del Consejo de Derechos Humanos, promovida por el Gobierno de los Estados Unidos a través del autodenominado “Grupo de Lima”, en clara violación a las normas y principios que rigen el tratamiento de los asuntos de derechos humanos.
Es muy preocupante que la Alta Comisionada ceda ante la presión de actores anti-venezolanos y realice afirmaciones sesgadas y alejadas de la verdad, haciéndose eco de campañas mediáticas y presentando especulaciones ideologizadas, como hechos.
A pesar de la presencia de su Oficina en el terreno y de los fluidos mecanismos de diálogo existentes con el Estado venezolano, derivados de la Carta de Entendimiento sobre asistencia técnica y cooperación recientemente renovada, la información que maneja y presenta la Alta Comisionada no dista mucho de la que difunden los Gobiernos y medios que aspiran un escenario de violencia en Venezuela.
Ante los infundados señalamientos emitidos, el Gobierno Bolivariano de Venezuela someterá a revisión la relación con la oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos y la próxima renovación de la Carta de compromiso, con el fin de garantizar el estricto y necesario apego a los principios de objetividad, no selectividad, imparcialidad, no injerencia en los asuntos internos y diálogo constructivo.
En este sentido, Venezuela aspira mayor rigor y objetividad por parte de la Alta Comisionada y sus equipos técnicos.