Do NOT follow this link or you will be banned from the site!

En Vivo

  • Opinión
  • /
  • Hasta que cruzan el arcoíris: el dolor de decir adiós a tu mascota
Opinión

Hasta que cruzan el arcoíris: el dolor de decir adiós a tu mascota

  • 24-Octubre-2024 7:27
  • Lectura:
/Foto: Cortesía


Nelsy Oviedo Corrales
Licenciada en Comunicación Social de la Universidad Central de Venezuela (UCV)

Locutora, Productora y Reportera 
Ancla de Emisión Estelar -  Noticias Venevision
Instagram: @nelsyoviedoc



Una amiga me dijo: Tener un perro es como tener un hijo sabiendo que se te va a morir a los diez años, un bebé que nunca creció. Otra comentó: Pero, son diez años de absoluta felicidad. Creo que ambas tienen razón...
 
Sea un perro, un gato u otro animal, hay un estrecho lazo entre una mascota y su dueño. La relación va más allá de las palabras, no sólo son animales, son compañeros, confidentes silenciosos, y parte integral de nuestras vidas cotidianas. Una presencia que ofrece amor incondicional, son en definitiva un refugio. Por eso, cuando nos dejan, el vacío es inmenso.
 
El duelo silencioso: El impacto emocional de perder a una mascota
 
Para la psicóloga clínica Mariana Cumare, este impacto emocional se subestima a menudo, ya que culturalmente no se le da el mismo valor que a la pérdida de otro ser humano. Por esto, quienes se enfrentan a situaciones como estas no saben muy bien cómo abordar esta pérdida en particular. Pueden llegar a sentirse poco entendidos, y esto lleva a que las personas repriman su dolor y se sientan culpables por estar tan afectadas por la pérdida. Sin embargo, la ciencia ha demostrado que el vínculo emocional con una mascota puede ser profundo, y por tanto, el duelo puede ser igual de intenso que el de perder a una persona cercana. Cumare menciona el apego y cómo el cerebro humano tiene estructuras y procesos relacionados que no diferencian entre un ser humano y una mascota.

                                   
                                                                  Mariana Cumare, psicóloga clínica

Lucky: el dolor y el amor que no se olvida
 
Cuando llega una mascota a nuestras vidas, nuestro primer encuentro siempre será un recuerdo feliz, uno que quedará marcado para el resto de nuestros días; su muerte, también lo hará.
 
Han pasado 7 años desde que Diana Vásquez perdió a su adorado Lucky, un cocker spaniel de color marrón claro, y aún tiene una vieja foto de su cara en su celular. No le importa que no tenga alta resolución, no deja de ser su fondo de pantalla, incluso cuando cambia de equipo.

                                                             Diana Vasquez y Lucky

"Recuerdo la primera vez que conocí a mi mascota. Era una camada de cachorros y cuando fui a buscar al afortunado Lucky, me cabía en la palma de la mano, tenía apenas unas semanas de nacido".

Lucky pasó toda su adolescencia junto a ella, la mitad de su vida. Aún recuerda con tristeza el 31 de agosto de 2017, cinco días después de su cumpleaños 28, cuando "su bebé" ya tenía 14 años y cruzó el arcoíris. Lucky había sido atacado por la erliquiosis canina, mejor conocida como la enfermedad de las garrapatas.

Cree que Lucky fue tan noble que la cuidó con su último aliento. "No dejó que lo viera morir". Falleció junto a los veterinarios, cuando ella no estaba con él.

 
Un duelo similar al de los seres humanos
 
¿Sabías que hay cifras que indican que algunas personas pueden entrar en depresión luego de perder una mascota?
 
De acuerdo con un estudio publicado en el Journal of Death and Dying, aproximadamente el 30% de las personas que pierden una mascota experimentan síntomas significativos de depresión, prolongados durante al menos seis meses después de la pérdida e incluso más.
 
¿El dolor se supera?
 
Para Mariana Cumare, reconocer y validar el duelo por la pérdida de una mascota es el primer paso hacia la sanación, ya que cada relación es única y, por lo tanto, el proceso de duelo también lo será. Entender las etapas del duelo y encontrar maneras saludables de enfrentar esta pérdida puede hacer que el proceso de sanación sea más llevadero.
 
Las tres emperatrices: Una mascota con herencia
 
Hay quienes encuentran en otra mascota una nueva forma de dar amor y rendir homenaje a quienes les dieron gratos momentos.
 
Una bella Cocker Spaniel color canela llegó a la vida de Sol Vargas. El paralelismo de su existencia con la ausencia de un hijo marcó la importancia de su compañía. Llenando el vacío de un hogar en el que se suponía nunca llegaría un bebé por diagnóstico médico. Todos sus cuidados fueron para esa cachorra que llegó colmando sus días de alegría durante 14 años. Un revés afortunado del destino también le trajo a la vida de Sol la añorada maternidad. Ahora su amor, fue doblemente inmenso.

"Sissy" fue el nombre que decidieron darle, en referencia a la emperatriz de Austria. Un nombre que la ha acompañado por décadas; fue la primera de tres perritas, cada una para rendir homenaje a la anterior.

                                                                Sissy (1994 - 2008)

Una tarde, que sería la última, la llevaron al veterinario enfermita, Tenía piometra. Ameliè (su hija) ya tenía dos añitos y preguntó: '¿A dónde la llevamos?' Yo le dije: 'Al doctor, porque no se siente bien'. ¡Yo sabía que Sissy no volvería!" La muerte de Sissy le dejó un enorme vacío, pero durante el tiempo que se unieron las líneas de sus tiempos, velaba el sueño de su bebé, no se movía de su lado “y la miraba con amor como si fuera su cachorrita”. Estaba teniendo ataques de pánico por su ausencia.
 
Le recomendaron visitar un lugar donde hubiera perros para que se sintiera mejor y, en el lugar indicado, conoció a la segunda Sissy, otra dulce y cálida cachorra Cocker Spaniel, también color canela, gracias a una mujer que tenía una cachorra.
 
"Le pedí que me la permitiera para enseñársela a mi hija sin pensar lo que pasaría. Al verla, Ameliè brincaba de alegría y dijo: '¡Mami, ya se mejoró, qué bueno que vuelve a la casa!' Pensó que era la misma."

                                                                          Sissy Banche (2008 - 2020)

Sol superó el dolor lentamente. Cuenta que con la nueva Sissy Blanche no hubo comparaciones. Era como si comenzara de nuevo, una renovación del amor por una mascota. Cree que su perrita le enseñó que el espíritu no muere, se transforma y te reconforta con cada día vivido a su lado.
 
"Me ayudó a encontrar de nuevo la felicidad, en una especie de reencarnación porque era idéntica a la primera". Ella también murió. Estuvo con ella 11 años (2009–2020). Nuevamente, deciden adoptar a una nueva Sissy,”Sissy Dorèe” esta vez como regalo de 15 años para su hija, quien aún está a su lado. Asegura que todas aquellas personas que tienen mascotas saben cómo amar el silencio incondicional de ellas cuando te miran.

                                                               Sissy Dorèe (2009–2020)

Dolor en 5 etapas
 
Mariana Cumare asegura que, para vivir un proceso de duelo desde la compasión y el entendimiento personal, es necesario comprender las fases de este proceso, y menciona las cinco etapas de duelo de Elisabeth Kübler-Ross:
  1. Negación: La persona tiene dificultad para aceptar que la mascota ya no está.
  2. Ira: Las personas experimentan enojo y frustración ante la pérdida.
  3. Negociación: La persona intenta buscar explicaciones y preguntarse qué hubiera pasado, con la esperanza de revertir la pérdida.
  4. Depresión: Se manifiestan sentimientos de tristeza, vacío y pérdida.
  5. Aceptación: Se comienza a aceptar la realidad de la pérdida, aunque la tristeza no desaparezca por completo.
Las fases no siguen un orden estricto; cada persona puede vivirlas de manera diferente y con distinta intensidad. Cumare enfatiza que lo más saludable es validar esas emociones, buscar apoyo en amigos y familiares, mantener recuerdos o realizar algún tipo de ritual de despedida.
 
Amor una palabra de cuatro patas: Más que una mascota
 
Las mascotas proveen estabilidad emocional y pueden ser un recurso de apoyo frente al estrés, la soledad y la ansiedad. La relación entre una mascota y su dueño es un vínculo de reciprocidad afectiva: el dueño provee cuidado y atención, mientras que la mascota devuelve lealtad y compañía.
 
Los veterinarios aseguran que las interacciones con mascotas pueden liberar oxitocina, una hormona asociada al bienestar y a la reducción del estrés. Por ello, tienen un impacto positivo en la salud mental de las personas. Resaltan la importancia de que los niños tengan a su cuidado perros o gatos, para que comprendan el proceso de la muerte como parte del ciclo de la vida.
 
La eutanasia: el sueño eterno
 
Dicen que la eutanasia puede ser considerada un acto de amor o misericordia; para otros, puede venir acompañada de un sentimiento de culpa. Surgen preguntas como: "¿Realmente era la única opción?" o "¿Hubiera podido hacer más?" Mandar a dormir a tu mascota es la decisión más difícil a la que se puede enfrentar un dueño. Es una práctica que busca aliviar el dolor, ya que la mascota ha perdido su calidad de vida. Es quitarle su sufrimiento.
 
Frank Franceschi, quien ha rescatado a 15 perros de la calle, ha pasado por ese proceso varias veces. Para él, tiene un ritual: les prepara una última cena.

                                                         Parte de la manada de Frank Franceschi

"Le pido al veterinario que le ponga algo para el dolor y me dé una hora para despedirlo. Lo abrazo en mi cama, con todos sus hermanitos alrededor, agradeciéndole todo el amor que me ha dado, diciéndole que todo va a estar bien. Para que sienta lo mucho que fue amado, y que en sus últimos momentos no esté solo".

                                 
                                                                                         Tronco

El veterinario César Lugo explica que, al momento de decirles a los dueños que es necesario dormir a sus mascotas, les muestran estudios y exámenes para facilitar y confirmar que han tomado la decisión más empática.
 
"Recordamos a los dueños esos momentos de alegría vividos con su mascota, para que no se lleven ese trago amargo al decidir practicar una eutanasia. Les recordamos que no sentirán dolor, que pueden estar mirándoles la carita y hablándoles, para que, al cerrar sus ojos, lo último que vean sea a quienes han amado toda su vida, a su lado".

                                  
                                                            César Lugo, Veterinario

 “Todas las mascotas van al cielo”
 
Escuché una vez que la razón por la que resulta tan dolorosa la muerte de un perro es porque el duelo es proporcional al amor que hemos recibido, y una mascota solo ha dado amor.
 
2022 y 2023, perdí a mis dos perritos. Dulce, mi perrita, murió a los 11 años de edad. La vi agonizar, y dio su último aliento mientras escuchaba mi voz. No sobrevivió a la recuperación después de ser operada. Un año después, en el mismo mes, murió Tambor, su bebé. Esa vez me tocó tomar la dura decisión de mandarlo a dormir, sufría mucho. Ya no podía más. Él estaba listo, pero yo no. A veces pienso que nunca quisieron separarse y me dieron ese tiempo de prórroga.

                                 
                                                                                            Tambor

El dolor aún se mantiene. Siempre he creído que los perros son ángeles que nos enseñan lo que es el amor verdadero.  Cuando mueren, ya cumplieron su misión. Perder a un ser querido nunca será fácil, pero quizás el mejor legado que nos dejan es la lección de amor incondicional. Nos recuerdan que el tiempo que compartimos, aunque breve, está lleno de momentos eternos.

                                    
                                                                    Tambor y Dulce

Noticias Venevisión
Comparte esta noticia: