Justicia de Perú revocó prisión preventiva dictada contra exdirectivo de Odebrecht

Una sala de apelaciones del Poder Judicial de Perú revocó la orden de 36 meses de prisión preventiva dictada contra el exdirector de la constructora brasileña Odebrecht en Perú, Jorge Barata, en el juicio por la adjudicación del Gasoducto Sur Peruano en el gobierno del expresidente Ollanta Humala (2011-2016), según la resolución publicada en Lima.

La Tercera Sala Penal de Apelaciones Nacional revocó la prisión preventiva dictada contra Barata, pero cambió esa orden por comparecencia con restricciones durante 24 meses, de acuerdo a la resolución difundida por los medios locales.

Además, Barata tendrá que efectuar el pago de 500.000 soles (133.000 dólares) de caución en un plazo de diez días.

La sala consideró que no se justifica la necesidad de imponer prisión preventiva contra Barata, que reside en Brasil, cuando existen otras opciones que pueden lograr el aseguramiento procesal.

La decisión judicial se produce después de la revocatoria del acuerdo de colaboración eficaz de Barata con el Equipo Especial de la Fiscalía para el caso Lava Jato en Perú, y de la apelación presentada por su defensa contra la prisión preventiva.

Barata es procesado como cómplice primario en el delito de colusión agravada por presuntamente haber concertado con el entonces mandatario Ollanta Humala y su esposa Nadine Heredia para obtener la adjudicación del proyecto Gasoducto Sur Peruano.

En este juicio oral, el exasesor de campaña de Humala, Martín Belaunde Lossio, declaró que Barata le entregó 400.000 dólares en 2006 para la primera campaña presidencial del exmandatario y que lo entregó directamente a Heredia.

En el 2023, Barata declaró, como testigo en otro juicio, que aportó tres millones de dólares a las campañas electorales de Humala, un millón de dólares a la de la excandidata Keiko Fujimori, otros tres millones de dólares a la exalcaldesa de Lima Susana Villarán, además de otros montos que no recordó a las campañas de los expresidentes Pedro Pablo Kuczynski y Alan García.

EFE