La Comisión de Comercio Justo de Japón emitió este martes una orden de cese y desistimiento por abuso de su posición dominante y haber violado la Ley de Antimonopolio al firmar contratos con firmas de teléfonos móviles para que instalen sus aplicaciones.
Según dicha comisión, desde julio de 2020, Google mantiene contratos con fabricantes de teléfonos inteligentes Android vendidos en Japón que les exigen incluir la aplicación de búsqueda Chrome y otras aplicaciones, y colocarlas de forma destacada en la pantalla.
Hasta diciembre del año pasado, Google había firmado contratos con seis fabricantes, que abarcaban al menos el 80% de los teléfonos inteligentes Android vendidos en el país asiático.
También había solicitado a los fabricantes que excluyeran las aplicaciones de búsqueda de la competencia y otras aplicaciones como condición para compartir los ingresos obtenidos por los servicios de publicidad vinculados a las búsquedas.
La Comisión de Comercio Justo nipona determinó, por tanto, que Google había violado la Ley Antimonopolio del país al darse una posición preferencial e impedir el negocio de otras compañías y pidió a la empresa que cese dichas acciones.
De no cumplir con esta medida administrativa, Google recibirá multas por parte del organismo japonés.
Además, dicha comisión también pidió a una tercera parte independiente que monitorice los esfuerzos de la compañía durante los próximos cinco años para prevenir que dichas acciones se vuelvan a producir.
EFE.