El terremoto que sacudió este lunes la provincia central de Sichuan deja ya 65 muertos mientras prosiguen las tareas de rescate en el epicentro del seísmo, donde se han registrado derrumbes de viviendas y cortes de comunicaciones.
Según el Centro de Redes Sismológicas de China, el temblor se produjo a las 12.52 hora local (04.52 GMT) del lunes a una profundidad de 16 kilómetros y tuvo su epicentro en el condado de Luding, en la prefectura de Ganzi, situado a unos 200 kilómetros de la capital provincial, Chengdu, de más de 20 millones de habitantes.
A las 7 de la mañana hora local del martes (23.00 del lunes GMT), el balance era de 65 muertos, 248 heridos y doce desaparecidos, informó el diario Global Times.
Entre los fallecidos, 37 se registraron en Ganzi, donde se sitúa el citado condado de Luding, mientras que las otras 28 personas perecieron en el término municipal de la ciudad de Ya’an.
Hasta la mañana local del martes, se habían registrado diez réplicas de una magnitud igual o superior a 3, una de las cuales llegó a 4,2, informaron las autoridades.
NIVEL MÁXIMO DE EMERGENCIA
De acuerdo con la escala utilizada por las autoridades sismológicas de China, un terremoto de magnitud 6 significa que la mayoría de personas afectadas no puede permanecer erguida de forma estable durante el seísmo y se pueden producir grietas en las paredes y la caída de tejas y chimeneas.
La provincia de Sichuan, con una superficie algo superior a la de Suecia y hogar de 84 millones de habitantes, activó el nivel máximo de emergencia tras el suceso, movilizando hasta la noche del lunes a 6.500 efectivos de tareas de rescate, cuatro helicópteros y dos drones.
Fuerzas de salvamento informaron a medios locales de que las réplicas habían dañado algunas carreteras, lo que dificultó su llegada a pueblos como Moxi, uno de los afectados por el seísmo.
Según la compañía eléctrica local, el martes por la mañana se había restaurado el suministro eléctrico a 22.000 hogares que sufrieron cortes por el temblor.
Los ministerios chinos de Finanzas y Gestión de Emergencias destinaron 50 millones de yuanes (7,25 millones de dólares, 7,29 millones de euros) para apoyar las labores de rescate y socorro.
En la madrugada local del martes, alrededor de 50.000 personas de la zona habían sido evacuadas.
Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, solicitó «hacer todo lo posible» en los trabajos de salvamento y «priorizar el salvar vidas y minimizar daños».
CHENGDU TEMBLÓ BAJO CONFINAMIENTO
Desde el pasado viernes, la capital provincial, Chengdu, se halla confinada hasta nuevo aviso para atajar un rebrote de covid-19 que dejó este lunes 59 nuevos casos sintomáticos, en línea con la política china de «cero covid», que implica confinamientos y campañas masivas de pruebas PCR allá donde se detecta algún caso.
Tras el temblor, varios de los más de 20 millones de habitantes recluidos en sus hogares publicaron en redes sociales locales vídeos de objetos caídos y lámparas oscilando en sus viviendas.
Dado que el seísmo se hizo notar en la urbe, causó temor entre algunos residentes, que trataron de escapar al exterior de sus edificios.
En algunos casos y, como muestran algunos vídeos que circulan por las redes sociales chinas, trabajadores ataviados con trajes EPI les impidieron salir de sus bloques, lo que ha despertado una ola de críticas en el internet chino.
Ante la polémica, la Comisión Municipal de Sanidad de Chengdu aclaró en las últimas horas que «en caso de desastres como terremotos o incendios durante el período de prevención pandémica», se debe «dar prioridad a la seguridad de la vida de los ciudadanos».
Algunos internautas lamentaron la explicación de las autoridades sanitarias: «Nunca pensé que esto se convertiría en un tema que fuese necesario debatir», deploraba un usuario de la red social Weibo.
El terremoto dejó también escenas que se han vuelto virales en las redes, como las de las maestras de una escuela poniendo a resguardo con valentía a sus pequeños alumnos, o las de la osa panda «Bingbing», que fue captada en la reserva de Wolong empujando a sus oseznos hacia el exterior de su habitáculo para buscar un espacio seguro mientras la tierra temblaba.
SICHUAN, ZONA SÍSMICA
La provincia de Sichuan se encuentra en una zona con frecuente actividad sísmica y fue el escenario de un catastrófico terremoto en mayo de 2008, de una magnitud de 8 grados y que dejó más de 90.000 muertos y desaparecidos.
Sichuan ha sufrido en los últimos cinco años 455 terremotos de una magnitud igual o superior a 3, la cual implica que algunas personas que se encuentran en interiores ya pueden sentir el temblor y que objetos colgantes experimentan cierta oscilación.
En ese mismo período, la provincia, una de las más pobladas de China, ha registrado cinco terremotos de magnitud 6, la misma que la del seísmo sucedido este lunes.
EFE