El Ejecutivo israelí aprobará en los próximos días extender el servicio militar obligatorio hasta los tres años -actualmente dura 32 meses-, tras aprobar anoche el órgano interno encargado de los asuntos de seguridad sacar adelante la medida.
Medios israelíes apuntan a que el plan podría recibir el visto bueno del Parlamento y la luz verde del Ejecutivo tan pronto como este domingo.
Tras aprobarse, la medida estaría en vigor durante los próximos ocho años.
El Movimiento por un Gobierno de Calidad en Israel, una organización defensora de la democracia, criticó la decisión de extender el servicio militar obligatorio mientras hay 63.000 judíos ultraortodoxos en edad militar sin integrarse en el Ejército.
"Mientras no haya un reclutamiento equitativo, no hay justificación legal o moral para poner más peso sobre las espaldas de los que ya están sirviendo", dijo el presidente del grupo, Eliad Shraga, en un comunicado.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, aprobó este martes el envío de órdenes de reclutamiento a judíos ultraortodoxos (haredim) a partir del mes de agosto, tras el fallo del Tribunal Supremo que obliga al Ejército a integrar a este segmento de la población en sus filas.
El asunto ha causado una airada respuesta de la población haredi, que teme que al mandar a sus jóvenes al Ejército pierdan sus costumbres y tradiciones ultra religiosas y abandonen a su comunidad.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa de Israel detalló que Gallant aprobó el envío, aunque no especifica cuántos de los aproximadamente 63.000 jóvenes haredim en edad militar recibirán órdenes de reclutamiento. Las fuerzas armadas israelíes ya han avisado de que para el año 2024 sólo podrían reclutar a 3.000.
Esto es porque los judíos ultraortodoxos tienen requisitos especiales en áreas como la dieta o la convivencia con mujeres, y el Ejército tendría que acomodar a los nuevos reclutas en batallones especiales.
Desde la fundación del Estado de Israel, en 1948, los jóvenes que estudian a tiempo completo en una escuela talmúdica (yeshivá) están exentos de realizar el servicio militar que es obligatorio para gran parte de la sociedad israelí (los árabes israelíes también están exentos).
La exención, que había sido prorrogada a través de disposiciones especiales hasta hace unos meses, ha sido siempre motivo de controversia, y más aún tras el comienzo de la guerra en Gaza y la escalada de tensión en la frontera con el Líbano, que han llevado al Ejército al borde de una crisis de personal.
EFE / Noticias Venevision