Estados Unidos anunció que va a proponer una resolución al Consejo de Seguridad de la ONU para "actualizar y endurecer" las sanciones internacionales contra Corea del Norte en respuesta a sus últimas pruebas de armas, incluido el lanzamiento del jueves 24 de marzo de un nuevo misil intercontinental (ICBM).
Así lo adelantó la embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, en un discurso ante el Consejo de Seguridad, reunido de urgencia para analizar este último ensayo norcoreano, el primero en casi cinco años con un arma de este tipo.
Thomas-Greenfield defendió la necesidad de reforzar las sanciones ante las "provocaciones cada vez más peligrosas" de Pionyang.
Tanto Pekín como Moscú tienen poder de veto en el Consejo de Seguridad, por lo que podrían bloquear la imposición de nuevas sanciones; en caso de aprobarse, se unirían a los amplios castigos que ya pesan sobre las autoridades de Corea del Norte.
La diplomática estadounidense recordó que esta última se suma a otras doce pruebas con misiles que Corea del Norte ha llevado a cabo en lo que va de año y a la supuesta reapertura de una instalación nuclear que estaba cerrada y que apunta a que Pionyang busca avanzar en su programa de armas atómicas.