Las autoridades de Austria, uno de los países más golpeados por la segunda ola de la pandemia del coronavirus, exigen desde este viernes a todos los viajeros que entren en el país, nacionales y extranjeros, que se registren previamente mediante un formulario electrónico.
El objetivo de esta medida es que sea más sencillo para las autoridades sanitarias poder controlar la cuarentena de 10 días que deben hacer los viajeros tras su llegada al país, aunque al sexto día se puede realizar un test PCR o de antígenos y en caso de un resultado negativo se puede salir de la cuarentena.
La medida no afectará a casos excepcionales como viajeros en tránsito, empleados en Austria que viven en países vecinos cerca de la frontera o personas que acuden al país por un asunto familiar urgente, como por ejemplo un entierro.
Las personas que lleguen de países considerados de «bajo riesgo» (Australia, Finlandia, Grecia, Islandia, Japón, Nueva Zelanda, Noruega, Singapur, Corea del Sur y el Vaticano) también deberán registrarse, aunque no tienen obligación de hacer cuarentena.
EFE