Dos miembros de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), que entrega los Globos de Oro, hicieron pública su dimisión con una carta en la que alegan que la organización promueve una cultura de «corrupción» y «abuso verbal».
La renuncia llega un mes después de que la cadena NBC cancelara la emisión de la gala de 2022 por denuncias de malas prácticas, ante las que la HFPA se comprometió a una renovación que aún no termina por concretarse.
«El aislamiento, el silencio, el miedo a las represalias, el trato egoísta, la corrupción y el abuso verbal son solo algunas de las formas que describen la dinámica actual», afirman en la misiva Diederik van Hoogstraten, representante de los Países Bajos y Wenting Xu, de China.
Ambos votantes explican que ven «insostenible» permanecer en una asociación que, a su parecer, no está por la labor de emprender ninguna reforma que mejore la mala reputación que arrastra desde hace años.
En febrero pasado, días antes de la última ceremonia, el diario Los Ángeles Times publicó una investigación que sacó a relucir una red de tráfico de influencias por la que la HFPA que no admitía a nuevos integrantes desde hace años, a pesar de que entre sus filas solo hay 86 personas. Ninguna de ellas negra.
Desde hace tiempo, muchas personas de la industria audiovisual sabían que sus miembros, entre los cuales hay personas que ni siquiera trabajan en medios de comunicación, se aprovechaban de viajes, pagos y otras oportunidades promocionales ofrecidas por los estudios de Hollywood.
«La mayoría de los miembros se resiste al cambio, a pesar de que nuestros abogados y portavoces sugieren públicamente lo contrario. La oposición interna al ‘status quo’ ha sido sofocada y las voces críticas como la nuestra se han ignorado en gran medida», señalan los dos integrantes.
Además, explican que desde que comenzaron las protestas ninguno de los miembros conoce las cuentas que controla la junta directiva, que se niega a dimitir o a someter los cargos a una nueva votación.
Con información de EFE.