La actriz estadounidense Julia Roberts apareció este jueves como invitada sorpresa en la alfombra roja del Festival de Cannes y se ganó al público y a la prensa con su característica sonrisa.
La intérprete estuvo presente en calidad de madrina del premio Chopard a jóvenes promesas, que este jueves por la noche recibirán la ugandesa nacionalizada británica Sheila Atim y el escocés Jack Lowden.
Roberts solo había estado en Cannes una vez, en 2016, cuando presentó fuera de competición «Money Monster», de Jodie Foster, con George Clooney como coprotagonista. En aquella ocasión desafió el código de vestimenta, que exige tacones a las mujeres, y subió descalza al Palacio de Festivales.
La actriz acudió hoy a la proyección de «Armageddon Time», del también estadounidense James Gray. Para este último es su quinta vez en competición, después de «The Yards» (2000), «We own the night» (2007), «Two lovers» (2008) y «The immigrant» (2013).
Acompañaron a Gray en ese pase dos de sus protagonistas principales, Anne Hathaway y Jeremy Strong, que pisaron por primera vez Cannes.
«Estoy feliz de estar aquí y es un honor hacerlo con un filme de James Gray», dijo el actor. En la película actúa también Anthony Hopkins, que no acudió pero es un habitual tanto en competición como en otras secciones del certamen.
En la famosa alfombra roja, una de los momentos más fotografiados de cada edición, y esta que se inauguró el martes y se clausura el 28 de mayo es la 75, estuvo igualmente la influencer española Gala González.
Por la mañana había acudido en la carpa de la marca de helados Magnum a la presentación del remix de la canción «Can’t get you out of my head», un clásico de la cantante australiana Kylie Minogue que esta última ha modernizado junto a la DJ, diseñadora de moda y productora musical surcoreana Peggy Gou.
EFE