La Comisión Europea recortó de nuevo sus previsiones de crecimiento para la eurozona para este año y, sobre todo, el siguiente, al tiempo que elevó aun más la inflación media esperada en 2022 y 2023 hasta el 7,6 % y el 4 %, respectivamente.
El impacto de la guerra rusa en Ucrania y el continuado aumento de los precios, especialmente de la energía y los alimentos, siguen pesando en las nuevas proyecciones macroeconómicas que el Ejecutivo comunitario ha desvelado este jueves.
En el caso de la Unión Europea, las nuevas proyecciones de la Comisión Europea mantienen un crecimiento económico este año del 2,7 %, pero reducen ocho décimas la estimación para 2023, hasta el 1,5 %.
En relación al aumento de los precios, la CE cree que se situará en el 8,3 % este año y en el 4,6 % el siguiente, frente al 6,8 % y el 3,2 % que calculaba hace dos meses.
EFE