La bolsa de Sao Paulo retrocedió este viernes un 0,87%, en contraposición al buen humor en el escenario exterior, y acabó la semana con un descenso acumulado del 0,72%, a pesar de las tres sesiones en verde que registró entre el martes y el jueves.
El índice Ibovespa, referencia del parqué brasileño, cerró la jornada de hoy con 125.052 puntos, en medio de las dudas sobre la economía brasileña y el pesimismo en torno a los datos de inflación de julio, que, según las últimas previsiones, seguirá subiendo.
Los operadores financieros observan con preocupación la escalada de los precios en Brasil, actualmente por encima del 8 % interanual, lo que podría llevar al Banco Central a aumentar los tipos oficiales de interés de una forma más acentuada la primera semana de agosto.
En el mercado de divisas, el dólar estadounidense se depreció un ligero 0,03% y cerró cotizado a 5,21 reales para la compra y la venta, en el tipo de cambio comercial brasileño.
EFE.