Las entidades que representan a las aerolíneas en el mundo afirmaron este martes que al menos 4,8 millones de empleos en la aviación están en peligro debido a la caída de la demanda del transporte aéreo de pasajeros.
La demanda disminuyó el 75 % el pasado agosto, en comparación con un año antes, un comportamiento del consumidor que se atribuye en gran medida a las restricciones fronterizas.
La cuarentena es la medida que más ha disuadido a la gente de viajar y que la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha pedido que se reemplace por test previos a los vuelos.
«Pedimos la intervención urgente de los gobiernos para evitar una catástrofe del empleo en la industria de la aviación», dijeron en un comunicado conjunto la IATA y la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte, entidades que funcionan en Ginebra y Londres, respectivamente.
Concretamente, la ayuda que piden debe tomar la forma de «un apoyo financiero continuado» y de una reapertura de las fronteras sin cuarentenas, pero sí con un sistema global armonizado de test de covid-19 antes de la partida.
Según la IATA, la voz de más de 260 compañías aéreas, las aerolíneas en su conjunto tienen dinero de caja sólo para ocho meses y medio, y esto tras haber recortado costes «hasta los huesos».
EFE