Uruguay rechazó la entrada de 17 ciudadanos brasileños que pretendían ingresar al país con motivo de la disputa, este sábado, de la final de la Copa Libertadores entre el Palmeiras y el Flamengo.
Según informó el Ministerio del Interior uruguayo en su cuenta oficial de Twitter, hasta las 10.00 horas (13.00 GMT) de este viernes, "se rechazó el ingreso al país de 17 ciudadanos brasileros en el marco de la final de la Copa Libertadores".
De ellos, 16 no cumplían "con la documentación necesaria" o estaban "impedidos de entrar a Uruguay", y la otra persona rechazada figuraba en "la lista de impedidos a ingresar a espectáculos deportivos".
De todos ellos, el grueso (5.040 personas) ingresó por el Aeropuerto Internacional de Carrasco, situado en las afueras de Montevideo, mientras que los puntos fronterizos de Chuy (sureste) y Río Branco (este) registraron a 4.265 y 3.372 personas procedentes de Brasil, respectivamente.
La seguridad se convirtió en un asunto central para las autoridades de Uruguay ante la celebración de las tres finales de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol), Copa Sudamericana y Libertadores femenina y masculina, en Montevideo.
Desde hace meses las policías de Brasil y Uruguay trabajan de forma conjunta para elaborar listas de 'barras bravas' (aficionados violentos) a los que impedir siquiera viajar desde el país vecino.
El acceso al Estadio Centenario para los partidarios de cada equipo será por lugares diferentes y, según difundió la Conmebol, no habrá conexión posible entre los diversos sectores del coliseo montevideano.
EFE