UCV y Carabobo se enfrentaron en el estadio Olímpico de la UCV, por el choque de ida de la Final Absoluta del Torneo Clausura. La paridad del 1-1 no se movió durante los 90′ para dejar todo abierto hasta la vuelta.
Lucas Bruera se puso la capa de héroe en el amanecer del encuentro, luego de que en los primeros minutos se diera un ida y vuelta de ambos combinados. Un centro en el área que tuvo segunda parte fue conectado cerca del pórtico del guardameta, que tuvo que usar sus reflejos para apagar el incendio.
Norman Rodríguez cazó un envío desde el tiro de esquina y causó preocupación en el arco local, pasando su cabezazo cerca del parante derecho de Miguel Silva.
El portero tricolor sacó una mano salvadora en última instancia para impedir el tanto de Flabián Londoño, que tuvo la posibilidad de girarse en la 16 con 50 para desenfundar el remate mordido.
El desarrollo del encuentro se tornó con la oncena granate utilizando su ímpetu para conseguir la recuperación tras pérdida, tratando de ahogar la salida capitalina y generar juego asociado con la esférica.
El duelo entre Robert Hernández y Kendrys Silva daba espectáculo por el sector derecho, al centrar gran volumen de juego por esa banda cuando el extremo buscaba encarar al lateral.
La polivalencia de Juan Camilo Pérez era influyente sobre el engramado, con el mediocentro variando su posicionamiento y apareciendo en distintas zonas del campo.
La pelota parada era un arsenal importante para los dirigidos por Daniel Sasso, ganando una gran cantidad de centros y segundas pelotas que los ayudaba a permanecer en 3/4 de cancha.
Una mala comunicación entre la última línea carabobeña y su cancerbero propició la apertura de la pizarra, en una pelota que no pudo ser despejada por la escasa coordinación y terminó siendo atrapada por Yeiber Murillo, para poder empujarla con el arco a disposición.
Una supuesta agresión en una jugada disputada terminó dejando al combinado tricolor con uno menos, luego de que Yender Herrera revisara la acción en el VAR y dejara fuera del partido al juvenil Alexander Granko.
Juan Camilo Zapata comenzaba a ubicar su radar pisando área contraria, llegando a desviar la trayectoria de la esférica con su botín para forzar la buena respuesta del portero albiceleste.
La capacidad asociativa del conjunto granate hizo efecto al minuto 53, cuando luego de moverla de lado a lado colgaron una pelota que conectó Carlos Ramos por los aires, poniendo la igualdad en la capital. Sin embargo, el principal fue llamado por los asistentes y terminó invalidando la acción para mantener el resultado parcial.
La oncena valenciana trataba de abrir grietas en la zaga universitaria, que resguardaba la ventaja con un bloque compacto ante la inferioridad numérica.
La puerta de Silva se rompió gracias a un centro envenenado de Yohandry Orozco que desvió Alfonso Simarra, anotándose en propia puerta por la difícil trayectoria que llevaba ese balón.
El timonel local utilizaba sus variantes para resguardar los espacios que aparecían por las líneas de cal y los pasillos internos, haciendo ingresar a Yohan Cumana y Maicol Ruíz respectivamente.
José Riasco estrelló un remate con la cabeza en el parante derecho, al imponerse por su biotipo y poder direccionar el mismo sin tener la marca encima.
Los últimos pasajes se dieron con un contraste táctico de ambos estrategas. Mientras Farías ajustaba piezas ofensivas en el último cuarto, Sasso fortalecía la zaga con las sustituciones.
El choque culminó igualado a pesar del ímpetu de la «Vinotinto Regional» por llevarse la victoria a casa, nuevamente gracias a la solidez defensiva capitalina que evitó perforaciones en su parado bajo.
Prensa Liga FUTVE