El Real Madrid sigue imparable en La Liga, sumando su quinta victoria consecutiva gracias a dos espectaculares goles desde fuera del área de Éder Militao y Kylian Mbappé, que sentenciaron el 2-0 frente a un combativo Espanyol.
El técnico blanco, Xabi Alonso, sorprendió con un arriesgado esquema de 4-2-4, que no terminó de funcionar en la primera mitad. A pesar del poderío ofensivo, el equipo se vio desorganizado, sin encontrar los espacios necesarios para conectar con sus delanteros.
El Espanyol, por su parte, tuvo una estrategia clara: dos líneas de cuatro para defender y ataques rápidos al espacio. Estuvieron a punto de sorprender al Real Madrid, especialmente en dos jugadas donde el gol se les escapó por centímetros: un centro que Militao tuvo que sacar in extremis y otro remate que no llegó a conectar el defensor Calero.
Sin embargo, a pesar de las dificultades, el talento individual fue la clave. En el minuto 22, Militao, quien regresó como líder de la defensa tras su lesión, destrabó el partido con un auténtico misil desde 30 metros. El balón, imparable, se coló en la portería del Espanyol para el 1-0.
Ya en la segunda mitad, apareció la magia de Mbappé. Tras una gran jugada de Vinícius Junior, el francés recibió el balón y, con su habitual frialdad, lanzó un potente disparo que se convirtió en el 2-0. Con este, Mbappé suma su séptimo gol de la temporada y quinto en La Liga, confirmándose como la gran estrella del equipo.
Aunque Vinícius tuvo un rol clave en el segundo gol, aún no logra alcanzar su nivel habitual. Sus disparos se encontraron con el palo y con el portero, y fue sustituido a los 76 minutos. A pesar de esto, el Real Madrid se mantiene en la cima de la tabla y sigue demostrando que es un equipo con múltiples recursos para ganar.
EFE