El portavoz de la presidencia de Rusia, Dmitri Peskov, declaró este jueves en su rueda de prensa diaria y negó que la reducción de los suministros de gas a Europa mediante el gasoducto Nord Stream sea una acción premeditada.
Dichas declaraciones responden a la acusación alemana, que insinuaron que esto tenía “una intencionalidad política”.
El representante del Kremlin alegó que no se trata de un problema de ellos, sino de “una turbina que no traen de vuelta, que fue bloqueada en algún lugar”, por lo que instó a los periodistas a dirigir sus preguntas al gigante gasístico ruso Gazprom.
En este orden, Gazprom redujo este martes un 40% la capacidad de suministro de gas a Europa, y luego anunció el miércoles que la reduciría en un 33% más, hasta 67 millones de metros cúbicos diarios.
— Gazprom (@GazpromEN) June 15, 2022
La compañía dijo que la empresa alemana Siemens no les entregó a tiempo los equipos de bombeo reparados, se superaron los tiempos de servicio técnico y se identificaron diversas fallas técnicas en los motores.
En este sentido, el número de unidades compresoras en la estación de bombeo de Portovaya, en la región de Leningrado, encargado de bombear el gas por Nord Stream, disminuyeron a tres.
A mediados de mayo, el consorcio tecnológico alemán se desligó del mercado ruso como resultado del conflicto en Ucrania y en seguida comenzó a suspender su operatividad y actividad industrial.
Noticiero Venevisión / El Universal