Brasil registró 1.086 nuevas muertes por coronavirus en las últimas 24 horas, con lo que el total de víctimas asciende a 25.598, en tanto que el número de infectados saltó hasta los 411.821, según informó este miércoles el Ministerio de Salud.
En la última semana, Brasil, el segundo país del mundo con más casos de COVID-19 y epicentro de la pandemia en Latinoamérica, ha superado en dos jornadas la barrera del millar de fallecidos en un único día (1.039 el martes y 1.086 este miércoles), lo que pone en evidencia la aceleración de la enfermedad.
De acuerdo con el boletín diario divulgado por la cartera, en las últimas 24 horas fueron notificados 20.599 nuevos contagios por el coronavirus, por encima de los 16.324 nuevos casos registrados el martes.
Mientras, 166.647 personas ya se han recuperado del COVID-19, lo que representa un 40,5 % del total de infectados.
Sao Paulo, el estado más poblado de Brasil con unos 46 millones de habitantes, se mantuvo a la cabeza como el más golpeado por el coronavirus, con 6.712 decesos y casi 90.000 casos confirmados, seguido de Río de Janeiro, que contabiliza 4.605 muertes y 42.398 contagios, respectivamente.
En el noreste las situaciones más críticas son las de los estados de Ceará, que suma 2.671 muertos y 37.275 infectados, y Pernambuco, con 2.468 fallecidos y unos 30.000 contagiados.
En el extremo norte de Brasil, los amazónicos estados de Pará, con 2.545 decesos y 31.033 casos, y Amazonas, con 1.891 y 22.508, respectivamente, lideran las cifras.
Pese al acelerado ritmo de contagio que sigue en línea ascendiente en todo el país, el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, decidió este miércoles seguir los pasos de otras regiones y anunció la reapertura gradual de la economía del estado a partir del 1 de junio próximo.
Doria afirmó que la desescalada «consciente» se dividirá en cinco fases y según las características específicas de cada zona, aunque la cuarentena vigente desde el 24 de marzo se extenderá hasta el 15 de junio, con algunas flexibilizaciones.
EFE