El Arzobispo de la Arquidiócesis Metropolitano de Caracas, monseñor Raúl Biord, expresó que se esperan buenas noticias dentro de poco tiempo, por lo que reiteró: “El proceso de canonización tiene varias fases. El milagro, ante todo, es examinado por un grupo de médicos, eso ya hace unos meses lo examinaron y dieron su voto favorable. Esta semana hubo una reunión de los cardenales y obispos, miembros del Dicasterio para la Causa de los Santos, ellos el martes dieron un voto positivo. Ahora el Dicasterio se lo remite al santo padre, al papa Francisco, quien examina estos votos y hará la aprobación del milagro y de la canonización”.
En este sentido destacó que se va por buen camino “sabemos que ya los médicos, y ante los abogados del diablo, porque también son unos que tienen que probar que realmente una persona es santa, le ponen a uno todas las dificultades. Pero entonces, antes, sean los peritos, abogados del diablo, los médicos. Y ahora los cardenales y obispos dieron su voto favorable Esperamos que el papa haga la aprobación”.
Lo estamos esperando en los próximos días y ojalá podamos tenerlo este año junto con José Gregorio Hernández. Pero vamos a esperar, que es el santo Padre quien va a dar la noticia, porque quiere tanto a Venezuela que ya nos regaló, ya hace un mes, la aprobación de la canonización de José Gregorio y ahora también de la Madre Carmen, cuando él lo diga y sea publicado.
¿Qué nos puede decir usted, como Arzobispo Metropolitano de Caracas, cuando se habla ya de que Caracas va a tener su primera santa, una santa caraqueña?
Pues la verdad que muy contento, que los dos primeros santos sean un laico, un médico y una religiosa, una mujer, esto es un reconocimiento a las mujeres venezolanas, que han tenido un papel fundamental en la transmisión de la fe, las abuelas, las mamás que enseñan la catequesis, que llevan a sus nietos a rezar, las religiosas, que bonito que tenemos tres beatas, la Madre Carmen, próximamente santa, la Madre María San José, cuyo proceso de canonización va adelante y esperamos que también en poco tiempo ella sea declarada santa, la Madre Candelaria, la Venerable Madre Emilia Chapellín, la fundadora de las Manitas de los Pobres, que bonito que tantas religiosas que en Venezuela se dedican a la catequesis, a la educación, a la salud, nos dan un testimonio de santidad, junto con tantas mamás catequistas. Por lo tanto, un reconocimiento a la mujer venezolana y una gran alegría en este año de júbilo que tendremos dos santos en Caracas y en Venezuela, dos santos de Venezuela para todo el mundo.
Posiblemente Venezuela estrene, como usted dice, en este año jubilar sus dos primeros santos. ¿Qué se puede saber ya y adelantar sobre ese acto tan esperado en la Plaza de San Pedro en Roma? Y ¿podríamos llegar a ver los venezolanos, dos estandartes de dos venezolanos, referencia y que, se convierten ahora en los guías espirituales de todos los habitantes de esta tierra y más allá de nuestras fronteras que tienen devoción tanto en José Gregorio Hernández como en Madre Carmen?
Por supuesto, y esperamos que sea dentro de este año jubilar, probablemente hacia final del año, porque ahora quedan todavía algunos pasos. Una vez que el Papa aprueba la canonización, se lleva un consistorio de cardenales, donde se establecen las fechas de canonización de los distintos santos. Hay otros santos también de América Latina, de otras partes. Entonces, el consistorio de cardenales establecerá la fecha. Y nosotros esperamos que sea este año, como tú dices, estos dos estandartes en la Plaza de San Pietro. Qué orgullo para Venezuela que desde este centro espiritual en un año jubilar tendremos dos modelos, dos santos, dos guías, dos intercesores delante de Dios, dos modelos para seguir, para que hagamos de Venezuela la Venezuela que ellos quisieron, la Venezuela que ellos sirvieron, una Venezuela de paz, de prosperidad, de entendimiento.
¿Qué representan para la historia del país estos anuncios y por fin tener Venezuela nuestro primer santo, Excelencia?
Es un gran significado para Venezuela. Ante todo, que los venezolanos podemos ser santos. Aquella poesía de Andrés Eloy Blanco, píntame angelitos negros, ahora podemos decir píntame santos del color de los venezolanos. Qué bonito que tenemos la puerta abierta, porque todos, tú y yo, todos los que me escuchan, todos los cristianos tenemos que hacernos santos. Todos tenemos que santificarnos.
Significa que tenemos que vivir una vida bonita delante de Dios, haciendo el bien a los demás. Por lo tanto, la canonización de estos dos santos es un símbolo para que Venezuela, de una vez por todas, encontremos caminos de unidad. Que pongamos el bien del pueblo, el bien de Venezuela, el nombre de Venezuela por encima de las diferencias económicas, sociales, políticas, religiosas y digamos, estos dos santos lucharon y quisieron a Venezuela. Los dos estuvieron fuera. La madre Carmen, de su congregación, la mandó a Francia.
Fue maestra novicia, fue superiora, pero regresó a Venezuela. Lo mismo hizo José Gregorio. Estando en Berlín, estando en París, estando en Nueva York, en Roma, siempre quiso regresar a Venezuela.
Por lo tanto, para los venezolanos, los que estamos aquí, y la diáspora de Venezuela, es también esa señal de que Venezuela es un país lindo, un país que Dios nos regaló, pero tenemos que esforzarnos para que sea lo más justo, lo más adaptado a los valores humanos y cristianos.
¿Cómo pueden ayudar los venezolanos, mientras que esa buena noticia llega de Roma, a trabajar porque pronto se den estas causas?
Pues, yo lo que creo es seguir la causa que José Gregorio y la madre Carmen insistieron. Comprometernos por mejorar nuestras relaciones día a día. Nuestra relación con Dios, nuestra relación también con los vecinos. Fíjense en una cosa, José Gregorio fue un profesor universitario. La madre Carmen fundó varias escuelas.
Por ejemplo, un compromiso por mejorar y fortalecer el sistema educativo venezolano. La madre Carmen quiso escuelas de calidad, y fundó en distintas partes del país, que todavía existen las escuelas de las Hermanas Siervas de Jesús. José Gregorio Hernández fue profesor universitario.
Uno de los temas sería fortalecer el sistema educativo, fortalecer el sistema de salud, en el cual tanto trabajó José Gregorio Hernández, fortalecer la investigación en las universidades. Pero sobre todo, entendernos que más allá de las diferencias, lo importante es el bien del pueblo, el bien de los venezolanos. Y que tengamos siempre presente a Dios, porque es una tierra de gracia, una tierra bendecida por Dios.
Entrevista exclusiva: https://www.instagram.com/reel/DHd_YUUOf6Z/?utm_source=ig_web_copy_link&igsh=MzRlODBiNWFlZA==
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