El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habló este lunes por teléfono con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, con quien abordó "la ampliación de los acuerdos de paz" y a quien invitó a Washington para mantener una reunión en la Casa Blanca próximamente.
Así lo informó la oficina de Netanyahu en un comunicado sobre esta llamada telefónica, que se produjo poco después de que el mandatario estadounidense instara al primer ministro israelí, a través de una publicación en redes, a mantener un "diálogo firme y de verdad" con Siria.
"En su conversación, ambos líderes destacaron la importancia y el compromiso con el desarme de Hamás y la desmilitarización de la Franja de Gaza y abordaron la ampliación de los acuerdos de paz", indicó el comunicado.
La primera fase del actual acuerdo de alto el fuego, impulsado por Estados Unidos y en vigor desde el 10 de octubre, contempla la reapertura del cruce de Rafah, en el sur de Gaza, para la entrada de más flujo de ayuda humanitaria, que alivie la situación de la población palestina tras más de dos años sin apenas acceso a comida, algo que Israel sigue sin permitir.
El Ejecutivo hebreo se escuda en que no lo hará hasta que las milicias palestinas devuelvan los dos últimos cuerpos de rehenes que todavía quedan en la Franja.
Por otra parte, en la segunda fase del alto el fuego se abordarán los asuntos más peliagudos entre Israel y Hamás, como la desmilitarización de la milicia palestina, la reconstrucción de la Franja, quién gobernará el enclave y si Israel continuará en la llamada línea amarilla o se replegará, entre otros asuntos.
La línea amarilla es la demarcación imaginaria a la que se retiraron las tropas israelíes cuando comenzó el alto el fuego y tras la cual todo el perímetro (más del 50 % de Gaza) continúa bajo dominio militar de Israel.
Por el momento, las negociaciones continúan en punto muerto con los gazatíes en condiciones infrahumanas, de habitabilidad y de acceso a recursos básicos que se han agravado semanas atrás debido a la llegada de intensas lluvias.
El portavoz de Hamás, Hazem Qassem, denunció este lunes que la mayoría de camiones que entran a la Franja actualmente "están destinados al sector comercial y transportan materiales complementarios que no se consideran esenciales para la ciudadanía en medio de la actual crisis humanitaria".
En total, desde que Israel empezara su ofensiva en Gaza como represalia por los ataques de Hamás en octubre de 2023, un total de 70.112 palestinos han muerto en ataques israelíes y 170.986 han resultado heridos, muchos con amputaciones y lesiones de por vida.
Además, bajo la consideración de que constituyen "amenazas inmediatas", las tropas israelíes han matado a gazatíes a diario desde que la tregua entró en vigor, ascendiendo la cifra total de fallecidos a 356 personas.
EFE