Los extranjeros que lleguen a República Checa a partir de este lunes 26 de diciembre, tendrán que presentar un test PCR reciente, a no ser que hayan recibido ya la dosis de refuerzo contra la covid-19.
De esta obligación, que busca limitar la expansión de la variante ómicron del coronavirus, están exentos los ciudadanos checos, quienes residen en el país y los menores de 18 años, para los que basta si tienen la pauta completa de inmunización.
La medida se aplica a las llegadas desde todos los países. Quien no esté vacunado deberá presentar un segundo test PCR a más tardar siete días después de haber entrado en el país.