Pakistán aprobó una nueva ley que prevé la castración química de los violadores y la creación de un registro nacional de delincuentes sexuales.
La ley, promulgada este martes 15 de diciembre, por el presidente, Arif Alvi, también prevé acelerar los juicios de casos de violación y otros abusos sexuales contra mujeres o niños.
El texto debe ser ratificado por el Parlamento, pero ya entró inmediatamente en vigor.
Tribunales especiales juzgarán los casos de violación y abusos sexuales cometidos contra mujeres o niños en un plazo máximo de cuatro meses.
“La norma permitirá acelerar el tratamiento de los casos de abuso sexual contra mujeres y niños”, declaró la presidencia en un comunicado.
Gran parte de Pakistán, país musulmán conservador, vive bajo un código patriarcal que sistematiza la opresión de las mujeres.
Las víctimas de delitos sexuales suelen estar demasiado asustadas para denunciar, y cuando dan el paso, esas denuncias se investigan sistemáticamente con negligencia.
Esta ley fue adoptada tras el caso en septiembre de una violación de una madre cometida por los miembros de una banda, en presencia de sus hijos, junto a una carretera. Este suceso provocó una gran conmoción en el país y llamados a endurecer la represión de los crímenes sexuales contra mujeres y niños.
Un responsable de la policía pareció culpar de lo sucedido a la víctima, al afirmar que conducía por la noche por una carretera sin ir acompañada por un hombre.
Cada día se registran 11 violaciones en Pakistán, según los datos oficiales. Pero las autoridades reconocer que las verdaderas cifras son mucho más elevadas.
Agencias