El presidente de Bielorrusia, Alekxander Lukashenko, el más próximo aliado del Kremlin, negó hoy que tenga planes de atacar a Ucrania, en una reunión con habitantes del distrito de Pruzana, en el suroeste de Bielorrusia.
«No creáis que yo estoy planeando un ataque, que vamos a bombardear Ucrania desde el territorio de Bielorrusia o algo así», dijo el mandatario, citado por la agencia oficial bielorrusa BELTA.
Agregó que no tiene «ningún deseo» de que sus hijos y los hijos de los ciudadanos bielorrusos combatan.
«¿En aras de qué? Tenemos que calmarnos», dijo el presidente bielorruso.
Aseguró que no es Ucrania la que combate, para añadir que «hoy contra Rusia lucha todo el bloque de la OTAN y sobre todo Estados Unidos».
Según Lukashenko, Europa hace mucho tiempo hubiera puesto fin a la guerra si Estados Unidos, con la ayuda de Polonia, no continuase atizando las acciones de combate.
El Gobierno ucraniano considera al régimen bielorruso «cómplice de la agresión rusa», por permitir desde su territorio no solo ataques de Rusia con cohetes, sino también la entrada de tropas rusas en Ucrania al comienzo de la «operación militar especial» lanzada por el presidente ruso, Vladímir Putin, hace casi seis meses.
«Jurídicamente y por largo tiempo Bielorrusia será considerada un país que prestó infraestructuras para la invasión rusa», declaró recientemente el asesor de la Presidencia ucraniana, Mikhaylo Podoliak.
EFE