Un gran incendio forestal en la región de Valparaíso, en la costa central de Chile, se extendió la madrugada de este sábado hasta consumir 2.630 hectáreas de terreno y alcanzar 7 viviendas sin dejar víctimas mortales.
«Este incendio pudo haberse transformado en una verdadera tragedia. Afortunadamente, el trabajo oportuno nos ha permitido controlar un fuego que pudo haber tenido proporciones trágicas para esa zona y para nuestro país», afirmó el presidente de Chile, Sebastián Piñera.
La Corporación Nacional Forestal (Conaf) precisó que el incendió se inició en cuatro focos simultáneos que afectaron a la comuna de Quilpué, a 110 kilómetros al noroeste de la capital, de los cuales dos permanecen activos tras consumir más de 2.630 hectáreas en total.
Las llamas, que el viernes obligaron a evacuar a 25.000 personas, alcanzaron un total de siete viviendas y dejaron diez personas damnificadas, según la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi).
Para controlar el incendio, las autoridades dispusieron de 30 unidades de bomberos, 27 brigadas de agentes forestales, 19 camiones aljibe, 16 helicópteros y 10 aviones cisterna, agregó la institución.
EFE