El papa Francisco considera que «no hay elementos suficientes» para investigar al cardenal canadiense Marc Ouellet, prefecto del Dicasterio para los Obispos, por abuso sexual, tras la denuncia presentada en el Vaticano por una antigua becaria de la diócesis de Quebec, afirmó hoy la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
«El papa Francisco declara que no hay elementos suficientes para abrir una investigación canónica por agresión sexual del cardenal Ouellet», apuntó el director de la Sala de Prensa vaticana, Matteo Bruni, en un comunicado.
Bruni explicó que estas son las conclusiones obtenidas tras «la investigación preliminar encomendada por el papa» al sacerdote Jacques Servais, un teólogo encargado de investigar el asunto, que ha estimado que «no hay elementos para iniciar un juicio contra el cardenal Ouellet por agresión sexual».
El director de la oficina de prensa del Vaticano también citó a Servais y dijo que la mujer denunciante no hizo ninguna «acusación que proporcionara material para tal investigación», «ni en su informe escrito y enviado al Santo Padre, ni en el testimonio vía Zoom» recogido por este sacerdote «en presencia de un miembro del comité diocesano».
Ouellet, uno de los cargos con más poder del Vaticano, está acusado de abuso sexual en Canadá por parte de una mujer que tuvo una beca como agente pastoral de 2008 a 2010, según una investigación de Radio Canadá.
Su nombre figura en una denuncia colectiva que afecta a otros 87 miembros de la iglesia y que ha sido presentada por 100 víctimas, muchas de ellas menores en el momento de unos hechos que tuvieron lugar en gran parte en la década de los cincuenta y de los sesenta.
En el momento de los hechos él era arzobispo y tenía la última palabra sobre las contrataciones del personal.
La demanda contra Ouellet fue presentada directamente en el Vaticano en 2021 y, aunque se organizó un encuentro entre la Santa Sede y la víctima, un año y medio después esta última asegura que no ha sido informada de los resultados de la investigación.
El cardenal fue llamado a Roma y nombrado en junio de 2010 prefecto para el Dicasterio de los Obispos, el órgano que selecciona a esos altos cargos eclesiásticos y que luego transmite el nombre de los elegidos al papa para que este tome la decisión final.
EFE