La decisión de la factoría Disney de estrenar la nueva versión de “Mulán” a través de su plataforma de “streaming” (Disney+) a cambio de una tarifa extra, ha caído como un jarro de agua fría entre sus muchos de seguidores, recalcando el precio “abusivo” de alquiler de la cinta.
Los seguidores entienden que, al igual que hacen otras plataformas, pongan la película de alquiler para toda aquella persona que quiera verla; ahora bien, en lo que no están de acuerdo es el precio “desorbitado” que ha propuesto Disney: 29,99 dólares (todavía no está en euros, pero se estima que la cantidad sea parecida) más la suscripción de la plataforma.
A esta queja del precio, que ha sido tendencia en Twitter este miércoles 5-A, se le suma la de la no aparición en la película de algunos de sus personajes originales -como bien dejó claro desde el inicio la industria del ratón- como es el de Mushu (el espíritu familiar de Mulán convertido en un dragón) y la eliminación de algunas de sus canciones originales. Ambos aspectos contribuyerin a dar popularidad a la película de 1998, de animación.
Panorama.