Nueve años después del fallecimiento de Alberto Aguilera Valadez, conocido mundialmente como Juan Gabriel ("El Divo de Juárez"), Netflix estrenará el próximo 30 de octubre la serie documental ‘Juan Gabriel: Debo, puedo y quiero’.
Lo que distingue a esta producción es su carácter completamente inédito: las únicas fuentes utilizadas son los vídeos, fotografías y audios privados que el propio artista grabó y guardó celosamente durante más de 40 años.
Una Vida Contada en Dos Episodios
La serie, dividida en dos episodios de poco más de una hora, es un recorrido íntimo por la vida del ídolo. La directora del documental, María José Cuevas, explicó que la narración abarca desde su solitaria infancia —que "determina lo que hace en el futuro"— hasta el controvertido concierto en el Palacio de Bellas Artes, del cual se incluyen "cámaras inéditas que no se usaron".
"Alberto dejó todo este material para que finalmente se hiciera un documental de su vida, tanto como artista como de la persona," afirmó la productora Laura Woldenberg. "Fue una persona muy privada, pero documentó absolutamente todo durante cuatro décadas y sentimos que lo hizo para que llegara este momento."
Más de 2.000 Cintas y el Trabajo de Paciencia
El documental se construyó exclusivamente a partir de "veinte cajas con más de 2.000 cintas, miles de fotos, recortes de periódico y cintas de audio". Esta inmersión en su archivo personal permite a la serie explorar:
Sus primeros pasos en la música y el salto a la fama.
Su relación con su madre y sus hijos.
La manera como afrontó las críticas sobre su orientación sexual.
Según Cuevas, el narrador principal es el propio Alberto con sus archivos, y la "tercera voz" son sus canciones. La labor de revisión y edición fue un "ejercicio de paciencia absoluto", que tomó siete meses de visionado y veintiún meses de edición.
EFE