El empresariado mexicano expresó este sábado una "profunda inquietud" por el futuro de la inversión en México, tras un decreto presidencial que provocó la toma de instalaciones ferroviarias del sector privado en el Istmo de Tehuantepec, sureste de México.
Este viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto que declara de utilidad pública tres tramos por más de 120 kilómetros, propiedad de Grupo México, y los cede a la empresa estatal Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec.
El CCE, que encabeza la cúpula empresarial y reúne a las 14 organizaciones más grandes de empresarios en el país, también reiteró su "plena disposición" para entablar diálogos con el Gobierno mexicano.
Asimismo, el organismo, que agrupa a más de 2.000 asociaciones empresariales y contribuye con cerca del 80 % del producto interno bruto (PIB) mexicano, aseguró que se pueden construir las mejores opciones que detonen el desarrollo del país entre el sector público y privado.
EFE