A un mes del inicio de los Juegos Olímpicos, París inauguró este lunes 24 de junio la línea de metro que permitirá acceder al aeropuerto de Orly, en el sur de la ciudad, y al estadio y la villa olímpica, en el norte.
La ampliación de la línea 14, tras seis años de obras, permitirá acceder al segundo aeródromo de París en 25 minutos desde el centro de la ciudad.
El presidente, Emmanuel Macron, asistió a la inauguración de una de las estaciones, la de Saint Denis Pleyel, en la periferia norte de París, donde agradeció «el compromiso colectivo» de todas las instituciones para hacer realidad este proyecto.
La nueva extensión de la línea 14 del metro parisino añade 14 kilómetros y ocho estaciones a su recorrido, tanto por el norte como por el sur, para convertirla en la más larga de la red, con 28 kilómetros y 21 estaciones.
El proyecto pone fin a seis años de obras, con un presupuesto de 3.500 millones de euros que incluye también la compra de nuevos trenes. La línea 14 es la más moderna del metro parisino y fue la primera en incorporar trenes autónomos sin conductor.
El metro a Orly estará incluido en el abono mensual de los transportes regionales de París (Navigo), pero los viajeros ocasionales, como los turistas, tendrán que pagar 11,30 euros por el billete.
Las previsiones de la empresa regional de transportes apuntan a que este verano, con los JJ.OO., utilicen la línea unos 800.000 viajeros diarios, cifra que aumentará hasta un millón en 2025.
Hasta ahora, al aeropuerto de Orly solo se podía llegar por autobús (expuesto a los atascos de París y su periferia) o por Orlyval, un metro ligero que conecta desde la línea B de trenes suburbanos (RER).
Al aeropuerto Charles de Gaulle, situado al norte y más alejado de París, se puede acceder por la línea B del RER y por autobús.
EFE