El Barcelona logró este miércoles sobreponerse a las adversidades, tras salir tocado del Clásico perdido contra el Real Madrid y lastrado por las bajas defensivas, y, fiel a su estilo y liderado por el argentino Lionel Messi, autor de un gol de penalti, se impuso por un autoritario 0-2 al Juventus en Turín para colocarse líder con el pleno de puntos en el Grupo G.
Un gol del francés Ousmane Dembelé al cuarto de hora, rubricado en el 91 por un penalti anotado por Messi, dejaron tocado a un Juventus gris, que vivió una nueva pesadilla europea sin el portugués Cristiano Ronaldo, que no pudo reencontrarse con Messi al seguir dando positivo por coronavirus.
Intentó cambiar la historia del partido el español Álvaro Morata, al que fueron correctamente anulados hasta tres goles por fuera de juego, pero el veredicto del campo fue merecido para un Barcelona que, de tener más pegada, habría podido sellar su primera victoria en Turín con un resultado mucho más abultado.
El equipo del holandés Ronald Koeman se colocó líder en solitario con seis puntos en el grupo G, con el Juventus segundo con tres puntos. El Dinamo Kiev y el Ferenvaros cierran la clasificación con un solo punto.
EFE