El regreso de la Bundesliga tras 66 dias de pausa por el coronavirus presentará este sábado una serie de curiosidades como el hecho de que en el banquillo los entrenadores llevarán mascarillas o que en cada estadio no habrá más de diez periodistas.
Los entrenadores, según el plan de la Liga Alemana de Fútbol (DFL), se podrán, sin embargo, quitar la mascarilla cuando quieran gritar instrucciones a sus jugadores.
Los tradicionales saludos de mano entre los capitanes se suprimirán lo mismo que la salida conjunta de los dos equipos titulares al campo.
Los jugadores que estén en el banquillo deberá guardar entre ellos la distancia de 1,5 metros para lo cual es posible que algunos se desplacen a la tribuna para que haya suficiente espacio.
En cuanto a la cobertura, como es obvio no habrá zona mixta -donde se suelen tomar declaraciones a los jugadores después de los partidos- y las conferencias de prensa serán virtuales.
Las salas de prensa en los estadios no estarán disponibles.
Solo habrá cuatro recogebolas por partido con una edad mínima de 16 años y que deberán llevar mascarillas y desinfectarse las manos continuamente.
Los balones también deberán ser desinfectados antes del partido y durante los noventa minutos.
EFE/Unión Radio