Brayan Rocchio elevó a 17 sus juegos de múltiples hits en la temporada

Brayan Rocchio se ha establecido como uno de los mejores toleteros de Cleveland desde principios de julio y el miércoles por la noche mantuvo esa tendencia, tras largar un par de indiscutibles, en la derrota de los Guardianes 4-3 contra Kansas City, en el Progressive Field.

Con esa actuación frente al pitcheo de los Reales, Rocchio elevó a 17 sus juegos de múltiples hits en la temporada, una nueva marca personal, tras dejar atrás el registro que había fijado en 2024, con 16 encuentros de ese calibre, de acuerdo con Baseball-Reference.

El infielder abrió 2025 en el roster de Grandes Ligas y mantuvo ese estatus hasta el 12 de mayo, cuando fue enviado al Columbus (Triple A), en medio de un profundo slump, que le tenía con promedio de .165 (91-15) y apenas .235 de porcentaje de embasado en 35 juegos, durante esa primera etapa arriba.

En ese instante, no estaba claro cuándo volvería al equipo grande. Pero su estancia de 41 juegos, en un lapso de un mes y medio, en Ligas Menores, le ayudó a reflexionar y hacer ajustes en el plato.

La oportunidad llegó el 1° de julio. De regreso con los Guardianes, Rocchio se mostró radicalmente cambiado con el madero y, desde entonces lidera a sus compañeros en average (.276) y dobles (13, igualado con José Ramírez), segundo en extrabases (18: 13  2B, 1 3B, 4 HR), tercero en hits (55), almohadillas alcanzadas (82, nivelado con Steven Kwan), OBP (.330), slugging (.412), OPS (.742) y remolcadas, con 32, 28 de ellas después del Juego de Estrellas.

“El verdadero cambio que hice al regresar, fue mi mentalidad”, le dijo Rocchio al periodista Paul Hoynes, de cleveland.com. “Tuve algunos pequeños cambios físicos, pero siento que el verdadero cambio fue en mi mentalidad”.

Durante ese lapso y antes de la jornada del jueves, el bateador de las dos manos subió su promedio global de .165 a .241; en tanto que liga de 30-10 (.333), con un jonrón, cinco anotadas, seis remolcadas, cinco boletos y seis ponches, en sus últimos 10 partidos.

“Cuando llegué aquí por primera vez, intentaba conectar cinco hits en cada turno al bate y jugar a la defensiva como un superestrella”, abundó Rocchio. “Me di cuenta de que tenía que bajar el ritmo, ajustar y simplificar lo que quería hacer en el campo”.

Brayan Rocchio inició los juegos de martes y miércoles en el campocorto de los Guardianes, en lugar del lastimado Gabriel Arias, quien se encuentra bajo observación médica día a día, luego de golpearse la muñeca derecha durante el triunfo de Cleveland 10-2 contra los Reales de Kansas City, el lunes.

“Jugará con algo de dolor”, comentó el miércoles el mánager Stephen Vogt. “Depende de su tolerancia, más o menos como estaba antes. (Las pruebas) realmente no mostraron nada que no pueda soportar… Dependerá de Gabby, lo cual es genial. Queremos tener a Gabby en la alineación lo más a menudo posible”.

Arias está teniendo su mejor temporada con los Guardianes. Abrió el año en segunda base y se movió al campocorto cuando Bryan Rocchio fue enviado en mayo a la sucursal Triple A de la organización.

La posición no le es extraña a Rocchio. Creció como uno de los principales prospectos del beisbol en las paradas cortas y el año pasado fue finalista del Guante de Oro.