Expertos descubren el motivo principal de transmisión de la viruela del mono

La viruela símica o viruela del mono es una enfermedad causada por el virus de la viruela símica que puede propagarse de animales a seres humanos o de persona a persona. A día de hoy en España ya se han notificado más de 4.500 casos de la enfermedad.

Así, se trata de un brote que actualmente está en expansión y, por tanto, en constante investigación. Recientemente un grupo de investigadores ha descubierto el principal motivo de transmisión de esta enfermedad.

De este modo, tras una revisión de 185 casos, los expertos aseguran que las características principales del brote actual confirman que la ruta de transmisión principal para el brote es fundamentalmente el contacto durante las relaciones sexuales.

La sintomatología cutánea es propia del contacto durante las relaciones sexuales

El brote actual de la viruela del mono incluye síntomas como fiebre e inflamación de los ganglios linfáticos, seguidos de un sarpullido generalizado que progresa a través de cuatro etapas distintas.

La fiebre y la inflamación de los ganglios linfáticos son síntomas comunes en el brote anterior de viruela del mono y el brote actual. Sin embargo, las lesiones en la piel no es un síntoma tan común entre ambos brotes, sino que es más común del brote actual.

Tal y como explica la doctora Alba Catalá, dermatóloga del Servicio de Dermatología del Hospital Clínic de Barcelona y autora principal de estudio, “lo habitual es que la sintomatología cutánea aparezca en zonas de contacto durante las relaciones sexuales. Esto puede incluir lesiones en la faringe, el canal anal, la cara y los dedos”.

Asimismo, el estudio también ha demostrado que las posibles lesiones dermatológicas que pueden aparecer con motivo de la enfermedad no son pústulas, sino pápulas duras que parecen pústulas, es decir, pseudopústulas.

Con ello, los expertos recalcan que se trata de un hallazgo muy importante, ya que, al haber muy pocas enfermedades producen este tipo de lesiones, esto “hace mucho más fácil reconocer la enfermedad”, indica Petunia Clavo, dermatóloga del Centro Sandoval en Madrid y autora de la investigación.

La misma doctora también ha asegurado que algunas de estas pápulas se necrosan y pueden dar lugar a úlceras genitales, por lo que dificultan el diagnóstico al ser similar con otras enfermedades.

Los pacientes acostumbran a ser hombres que tienen sexo con hombres

Del mismo trabajo se han podido extraer otras conclusiones. Por ejemplo, el estudio refleja que ni la enfermedad por VIH bien controlada ni la vacunación de viruela previa han afectado a la gravedad de las lesiones en los pacientes del estudio.

Además, según recalcan los autores, que un paciente tenga otra infección de transmisión sexual (ITS) no le excluye de padecer viruela del mono.

Asimismo, todos los pacientes que contraen la viruela del modo deberían ser estudiados para descartar otras enfermedades de transmisión sexual.

Los expertos explican que el perfil del paciente es claro: los casos estudiados estaban compuestos fundamentalmente por hombres que tienen sexo con hombres y se asociaban con frecuentes comportamientos de riesgo para adquirir enfermedades de transmisión sexual, aunque estos datos podrían cambiar con el tiempo.

"Con frecuencia las epidemias empiezan en un colectivo concreto y luego se van extendiendo, pero actualmente los esfuerzos para proteger de la enfermedad deberían centrarse en este grupo", comenta la doctora Catalá, quien insiste en que es necesario continuar investigando para lograr prevenir la infección y reducir el riesgo de padecer la enfermedad".

Con información de Mundo Deportivo