Las autoridades de la provincia de Hebei, en el noreste de China, decretaron este martes el confinamiento de los 4,9 millones de los residentes de la ciudad de Langfang, para evitar que el coronavirus continúe propagándose en la región, vecina a Pekín.
Además de Langfang, están también en cuarentena la capital provincial, Shijiazhuang, y Xingati, otra ciudad de Hebei, informa el periódico Global Times.
Según la agencia de noticias estatal Xinhua, la provincia detectó entre el 2 y el 10 de enero 326 casos locales de covid y 234 contagios asintomáticos.
El vicegobernador provincial, Xi Jianpei, indicó hoy en rueda de prensa que 304 de los casos confirmados se registraron en Shijiazhuang, 21 en Xingtai y 1 en Langfang, las tres ciudades ahora confinadas.
Así, los residentes y los vehículos no podrán salir de estas tres ciudades a no ser que sea estrictamente necesario, agregaron las autoridades.
Las autoridades no precisaron durante cuánto tiempo deberán permanecer confinados los residentes de esas localidades.
El cierre de las ciudades se produce a un mes exacto del inicio del Año Nuevo lunar, las festividades más importantes en el país asiático y que van precedidas de desplazamientos de millones de chinos, que regresan de sus lugares de trabajo a los de origen para festejar el nuevo año en familia.
La Comisión Nacional de Sanidad de China informó este martes de 55 nuevos casos, de los cuales 42 se produjeron por contagio local. De esos 42, cuarenta se detectaron en la provincia de Hebei.
EFE