Millena Brandão, actriz brasileña que participó en la serie de Netflix ‘Sontonía’, murió a los 11 años tras caer enferma y ser hospitalizada.
La noticia de su fallecimiento, ocurrido el viernes 2 de mayo, ha sido confirmada por sus padres, Thays Brandão y Luiz Rodrigo, así como por servicios de salud de Brasil, según CNN.
De acuerdo con el reporte del medio brasileño g1, la madre de Millena Brandão compartió que la llevaron por primera vez al doctor, en el Hospital General de Pedreira, en São Paulo, el 24 de abril, tras presentar malestares.
“Le dolía la cabeza, pero podía andar y hablar. El médico dijo que era dengue, pero no le hizo ninguna prueba. Nos dijo que la lleváramos a casa y le diéramos dipirona”, contó Thays Brandão al medio.
Dos días después, expone la mamá, al artista adolescente continuaba con los síntomas y “empezó a quejarse del dolor en la pierna, que no podía caminar”, por lo que volvieron a llevarla a la mencionada clínica, en donde los análisis de sangre no mostraron cambios y los especialistas la regresaron a su hogar.
La noche del lunes 28, Millena se desmayó en el baño de su residencia, por lo que su familia la trasladó a un hospital diferente, pero también dependiente del gobierno local.
Según los padres, las pruebas descartaron dengue, Covid y H1N1, pero los doctores indicaron “que tenía una infección del tracto urinario”, recordó Thays, así que la trataron.
Luego de que la menor “se puso la mano en la cabeza y gritó de dolor”, el equipo que la cuidaba decidió solicitar un lugar para ella en una clínica de la capital.
A la mañana siguiente, ella tuvo su primer paro cardiorrespiratorio: “Su labio se puso morado. Entonces la reanimaron y la intubaron. Desde ese día, nunca despertó”.
El martes 29 de abril, Millena Brandão fue trasladada al Hospital General de Grajaú, donde, asevera su mamá, “no había ningún neurólogo”.
“Sólo le hicieron una tomografía computarizada y los médicos dijeron que habían visto una masa de cinco centímetros en su cerebro. Pero no sabemos si era un tumor, un quiste, un edema, un coágulo… porque no pudieron abrirle la cabeza”, puntualizó Thays Brandão.
Tras ese descubrimiento, la menor “empeoró, con dos o tres paros cardíacos al día”: “Tuvo 13 paros en total. Nunca le había pasado”.
“Un día tuvo siete paros respiratorios”. A veces la masajeaban y a veces le daban descargas [con un aparato desfibrilador]”, recordó.
Según Thays, cuando pudieron llevarla al Hospital de Clínicas, en el que sí habría expertos en neurología, los doctores optaron por no hacerlo: “Prefirieron dejarla para ver si se estabilizaba porque sólo con manipular su cuerpo le daba un paro cardíaco”.
El viernes 2 de mayo, los médicos le realizaron a Millena un encefalograma, que confirmó muerte cerebral, pero externaron que esperarían a que su corazón se parara naturalmente antes de apagar las máquinas que la mantenían viva, especificó su mamá.
“Les dije que si dejábamos que su corazoncito dejara de latir por sí solo, sufriríamos más, y ella también. Y les pedimos que apagaran los aparatos”, contó.
Después del deceso y en medio de su luto, Thays aseguró que “los médicos aún no han dicho qué le pasó realmente” a su hija ni “qué la mató”: “Van a hacerle una biopsia para averiguar qué había en su cerebro”.
El martes 29 de abril, Millena Brandão fue trasladada al Hospital General de Grajaú, donde, asevera su mamá, “no había ningún neurólogo”.
“Sólo le hicieron una tomografía computarizada y los médicos dijeron que habían visto una masa de cinco centímetros en su cerebro. Pero no sabemos si era un tumor, un quiste, un edema, un coágulo… porque no pudieron abrirle la cabeza”, puntualizó Thays Brandão.
Tras ese descubrimiento, la menor “empeoró, con dos o tres paros cardíacos al día”: “Tuvo 13 paros en total. Nunca le había pasado”.
“Un día tuvo siete paros respiratorios”. A veces la masajeaban y a veces le daban descargas [con un aparato desfibrilador]”, recordó.
Según Thays, cuando pudieron llevarla al Hospital de Clínicas, en el que sí habría expertos en neurología, los doctores optaron por no hacerlo: “Prefirieron dejarla para ver si se estabilizaba porque sólo con manipular su cuerpo le daba un paro cardíaco”.
El viernes 2 de mayo, los médicos le realizaron a Millena un encefalograma, que confirmó muerte cerebral, pero externaron que esperarían a que su corazón se parara naturalmente antes de apagar las máquinas que la mantenían viva, especificó su mamá.
“Les dije que si dejábamos que su corazoncito dejara de latir por sí solo, sufriríamos más, y ella también. Y les pedimos que apagaran los aparatos”, contó.
Después del deceso y en medio de su luto, Thays aseguró que “los médicos aún no han dicho qué le pasó realmente” a su hija ni “qué la mató”: “Van a hacerle una biopsia para averiguar qué había en su cerebro”.
Luego de lo ocurrido, la Secretaría Municipal de Salud informó que “se abrirá una investigación para indagar” si la atención que Millena Brandão recibió fue la adecuada.
Univision.